Llueve
Llueve,
caen lágrimas doradas
bajo la noche estrellada,
sobre un silencio opaco,
entre mi amor y tu querer.
Olor intenso que arrasa,
A su paso agigantado,
en superficies bañadas,
por las luces celestes.
¿Que son entonces
los fulgores repentinos?
dadores de caminos,
usurpadores de sueños,
responsables de tus miedos.
Nostalgia cedida,
con besos y abrazos,
regresa, apresúrate,
alba desnuda
sabor del ocaso.
3 comentarios
Ave Fénix -
pseudo -
que malviaje...
me gustan las noches de lluvia... pero, las de dolor son todavía más sublimes...
que malviaje...
saludos :)
cuídate ;)
Blanca -
Un beso!